Ya empecé el viaje por Perú y como todo lo que estoy viviendo es muy nuevo, voy a ir relatando mi experiencia semana a semana para compartir de a poquito.
Llegue a Tarapoto el viernes pasado, el sábado tuve la entrevista en Takiwasi, que es el primer lugar donde voy a estar trabajando con plantas. (www.takiwasi.com)
En este centro se especializan en toxicomanías y lo trabajan integrando los conocimientos de medicina tradicional indígena con seguimiento psicológico y médico. Están las personas que se internan con alguna toxicomanía fuerte (alcohol, drogas, etc) en un lugar especial y sin contacto con el afuera; y están los que van como yo que queremos hacer un trabajo de «limpieza» y aprendizaje, que vamos al centro solo los días que nos toca tomar las plantas.
Para la medicina indígena el cuerpo físico es el principal instrumento de curación, por lo tanto hay que limpiarlo y prepararlo. La manera de depurar el cuerpo es con plantas que generan vómitos y/o diarrea. Mientras que para la medicina occidental ambos son signos de toxicidad o enfermedad, para la cosmovisión indígena tienen una importancia crucial en el proceso de curación y hasta de transmisión de sabiduría. Al vomitar se liberan las cargas físicas, emocionales, mentales y espirituales. No se puede incorporar lo nuevo, lo que uno esté buscando, si antes no se limpia el cuerpo.
En general para tomar las plantas de purga hay un ayuno o medio ayuno previo. La planta la prepara y la convida un curandero, cantando ícaros, soplando tabaco, soplando plantas perfumadas, etc. Las sesiones de purga suelen hacerse de día, a diferencia de la Ayahuasca que en general se toma de noche.
Doy esta explicación previa porque sino es difícil compartir mi experiencia, que como dicen en la películas: «contiene escenas fuertes, si es muy sensible no lo lea».
A mi me armaron un programa de un mes y medio aproximadamente. Lo comencé el lunes con una de las purgas máaaaaas fuertes: Yawar Panga. Limpia fuerte. Estuve vomitando desde las 3 de la tarde hasta las 11 de la noche. Ese fue mi primer día de trabajo. Estaba tan cansada que de verdad tenía la mente en silencio. Solté hasta los pensamientos.
El martes estuve todo el día tranquila, lenta y a la noche tome Ayahuasca. Por suerte la planta estuvo tranquila para mi, fue una sesión bien suave, lo que si comencé la limpieza por abajo. Fui tres veces al baño en la sesión, lo cual es bastante.
El miércoles me vino la regla y como no puedo tomar ningún calmante por la limpieza que estoy haciendo, estuve todo el día doblada de dolor, quietita en mi casa. Ese fue un día duro de atravesar.
El jueves tome Rosa Sisa y un poquito de tabaco y tuve todos los efectos: vómitos, diarrea y transpiración. Tengo los poros tan abiertos que sale agua por todos lados. En un momento el curandero me soplo tabaco en los pies y las piernas, me canto unos ícaros fuertes y automáticamente deje de sentir calor (como fiebre) y quede fresca como una lechuguita.
El viernes tuve mi primera sesión de terapia para chequear como voy en el proceso. Me sentí contenida, tuvimos linda afinidad.
Hoy sábado tome leche de Magnesia con agua de coco, otra purga, limpia por abajo pero es super tranquila. Todos dicen que después de Yawar Panga, la purga que tomé el lunes, todas las demás son tranquilas.
A una semana de haber empezado me doy cuenta la enorme diferencia que siento. No he vuelto a comer dulces: ni chicles, ni caramelos, ni golosinas, ni helados, ni nada. Lo cual para mi es absolutamente sorprendente. Estoy en paz, sonrío con facilidad.
He estado conociendo gente muy afín que están haciendo procesos parecidos al mío. Por ejemplo Franz, austriaco, médico psiquiatra y músico. Lindísima persona. Viene dietando desde hace dos meses en Iquitos y ahora esta en Takiwasi. Nos reímos mucho de nosotros mismos.
Bien por ser la primera semana, los voy dejando con un abrazo fuerte.
Estoy feliz de estar haciendo esta experiencia,
Seguiremos en contacto,
Bendiciones,
Inés